La inteligencia artificial en la toma de decisiones de tu empresa

La inteligencia artificial en la toma de decisiones de tu empresa

Pensar que los algoritmos van a ser los futuros “jefes” de las empresas de sectores como la sanidad, las finanzas o los seguros, puede parecer un poco futurista, pero lo cierto es que son muchas las empresas que están comenzando a utilizar la inteligencia artificial para mejorar la toma de decisiones.

Para muchas compañías es un riesgo que la persona que tiene la última palabra durante la toma de una decisión, esté acertando con su decisión o, por el contrario, perjudicando la marcha de la empresa. ¿Cuántas empresas habrán perdido dinero o habrán acabado cerrando por culpa de una mala decisión?

Todo apunta a que la inteligencia artificial ayudará a ahorrar millones de euros, por ejemplo, en el sector de los seguros de automóviles. ¿Todos los conductores tienen que pagar el mismo seguro por su coche? Parece ser que la inteligencia artificial tiene la respuesta, ya que un conductor que incumple las normas de seguridad no debería pagar lo mismo que otro que conduce correctamente. Por ello, el uso del “Big Data” (la gran base de datos), ayudará a que las compañías tengan más información para que, en función de la conducción del cliente, el precio de su seguro aumente o disminuya.

Aunque parezca que esta tecnología no llegará a las empresas hasta dentro de unas décadas, empresas como SAS, líder en analítica predictiva, ayudan a varios sectores a mejorar la toma de decisiones gracias a la analítica de datos. Su eslogan es “Con la visión correcta todo es posible”, y es que, sin ninguna duda, los datos ayudan a las empresas a tener una visión que su personal nunca llegaría a percibir.

Otros sectores, como el judicial, también están empezando a ver cómo esta tecnología se puede utilizar para determinar si el acusado debe tener una pena más o menos dura, dependiendo de sus antecedentes. Sería la inteligencia artificial la que tome la decisión basándose en el historial del sospechoso.

En esta noticia de The New York Times, “Enviado a prisión por algoritmos secretos de un programa de software”, vemos como este programa utilizaba unas gráficas con hechos del sospechoso, cuyo resultado llevaba a concluir que éste podría cometer más crímenes. Según el programa, era un peligro latente para la comunidad. Esto que quizás parezca muy útil y puede ayudar en muchos casos, también puede suponer un peligro para presuntos inocentes.

Aunque pueda parecer que la utilización de esta tecnología lo hace todo más fácil para la sociedad, también tiene su parte negativa. Según el científico Stephen Hawking, la inteligencia artificial podría significar el fin de la raza humana. Haciendo clic aquí puedes leer la noticia completa. Y es que la utilización de una tecnología que resuelve problemas que ni si quiera el cerebro humano está capacitado de realizar, puede acabar con puestos de trabajo y, aún peor, podría volverse en contra cometiendo errores que las personas no sepan detectar a tiempo.

¿Cómo afectará la inteligencia artificial a las herencias familiares? Aún no hay nada sobre este tema, pero viendo cómo está avanzando toda la industria relacionada con el “Big Data”, la duda es si en unos años veremos a familias realizando un testamento con la ayuda de profesionales en inteligencia artificial para elegir el mejor reparto de su herencia. Incluso yendo más allá, gracias a esta tecnología, el cliente podrá ver diferentes hipótesis dependiendo del reparto de su herencia. Preguntas como “¿Qué pasará con mi herencia cuando la hereden mis hijos?” o “¿Quiénes son las personas más preparadas para heredar?”, podrían tener una respuesta más precisa en unos años.

Actualmente puede sonar a ciencia-ficción, pero todo indica a que en unos años, la mayoría de los sectores estarán ligados a la inteligencia artificial para mejorar la tomas de decisiones.

 
Álvaro Mariscal
Fortium Family Office

 

 

El I+D y la lana de merina

El I+D y la lana de merina

La oveja merina es actualmente una de las razas más extendidas por todo el mundo. Pero hasta el siglo XVIII su hábitat estuvo restringido a España. Al igual que la obtención de la seda era un secreto de estado en China, la oveja merina y su lana se consideraba un bien estratégico para la economía española y era un grave delito el intentar exportarlas fuera de España. La lana de oveja merina era de mejor calidad que la de otras razas, tenía la característica de ser más fina, más densa, más elástica y resistente.

Si bien fue en el siglo XIII cuando se creó la Mesta y empezó la expansión del comercio de lana merina, su edad de oro coincide con el descubrimiento de América y la “europeización” de la monarquía española, es decir los siglos XV a XVIII. La industria transformadora de la lana, en España era mínima, por lo que la producción superaba con creces la demanda interna y el excedente se exportaba a los Países Bajos y más tarde a Inglaterra, donde se abastecía la gran demanda de la industria textil de estos países.

Los productores parecían tener bastante con esquilar ovejas, lavar vellones y enviar las balas de lana a Europa. Y el estado parecía tener suficiente con proteger a la mesta y cobrar impuestos. Se creía que las características tan apreciadas de la lana merina las daba la propia tierra dónde se criaban las ovejas y la trashumancia norte – sur a través de las cañadas reales, y que la cría en tierras extranjeras no tendría éxito.

Como vemos, aparte de la plata de América, una materia prima valiosísima, sin transformar, marchaba camino de Europa sirviendo de paso para financiar las múltiples guerras.

Pero con el ocaso del imperio español a finales del XVIII todo esto cambiaría. En el  Tratado de Basilea de 1795, que puso fin a la guerra entre la República Francesa y la España de Carlos IV, se introdujo una cláusula secreta en la que se obligaba a España a entregar 5.000 ovejas y 500 carneros. Posteriormente, con la guerra de la independencia, continuó el saqueo y la exportación hacia Francia e Inglaterra. Así pues, este “recurso natural” que formaba parte de la estructura económica del país, pasó además a otros lugares, como Sajonia, Baviera o incluso Nueva Zelanda o Australia. Estos países no solo consiguieron aclimatar a la oveja merina, si no que, aplicando lo que hoy denominaríamos I+D, consiguieron mejorar el producto a base cruces con razas locales. Así que la oveja merina dejó de ser una “mina de oro” y un monopolio para España. A lo largo del siglo XIX la competencia en calidad de estos países y la sobreproducción hizo mella en los precios de la lana española. Esperando subidas de precios y ocurriendo lo contrario, se produjeron transacciones ruinosas y la crisis del sector. Vamos, lo de siempre.

Podemos sacar algunas conclusiones aplicables a nuestros días. No hay que confiarlo todo a lo que creemos un recurso estructural indestructible, como el turismo o el petróleo. Debemos diversificar e innovar, porque la competencia siempre intentará copiarnos…y puede que lo haga mejor.

 

 

Juan García Diez
Fortium Family Office

 

 

La revolución de los medios de pago

La revolución de los medios de pago

La tecnología nos hace la vida más fácil, pero también puede ser un arma de doble filo cuando se trata sobre todo con la privacidad de las personas. Desde hace varios años, algunas empresas del sector están trabajando para lanzar formas de pago mucho más sencillas para los usuarios. ¿Tú confiarías en métodos de pago de empresas como Apple o Google?

Quizás sea pronto para que hayas podido comprobar la utilidad de estas nuevas formas de pago. Por el momento no podemos hablar de “nuevos bancos tecnológicos” (si quieres leer lo que Enrique Dans escribió en su artículo, puedes hacerlo en este enlace), pero sí de herramientas que nos ayudan a pagar de forma fácil y (supuestamente) segura.

El sector bancario no está destacando por su eficaz adaptación al mundo digital y empresas tecnológicas, como Google o Apple, que cuentan con un gran volumen de información de los usuarios, están dando pequeños pasos en esta dirección. Si continuamos por esta senda, es muy posible que, de aquí a unos años, dejemos de pagar como lo hacemos actualmente.

Estas herramientas nos permiten ir mucho más allá de un simple pago. También podremos enviar dinero a alguien usando sólo la dirección de correo electrónico o el número de teléfono móvil. Lo único que necesitas para poder usar estos sistemas es disponer de una cuenta en una de las herramientas como Google, Apple o Paypal y una tarjeta de débito o crédito.

¿Llevarías dinero dentro de tu móvil? Aunque parezca raro, o quizás ya no tanto, Paypal ya hace que dispongas de “dinero en tu móvil” y actualmente plataformas como Apple Pay o Google Wallet se están adaptando para hacerte el pago de tus compras físicas y online mucho más fáciles y rápidas.

Las generaciones más jóvenes (los millennials, generación Z y similares) tienen una mayor predisposición a confiar en estos dispositivos. Prácticamente han nacido con un Smartphone insertado en la oreja. Pasan casi todo el día pegados a sus dispositivos móviles, muchos de ellos de marcas como Apple y utilizando sistemas relacionados con Google. Además, la mayoría tienen fotos, información de contactos, mensajes,…en sus dispositivos y depositan toda su confianza en estas marcas tecnológicas. ¿Por qué no iban a hacer lo mismo a la hora de pagar?

Otro motivo que aumenta la posibilidad de que el futuro de los pagos sea similar al que ofrecen estas marcas tecnológicas es que los jóvenes desconfían cada vez más de los bancos tradicionales.

Aun así y, a pesar de todo lo dicho, la incertidumbre estará presente. Si entramos en la web de Apple Pay o Google Wallet veremos repetidas veces las palabras seguridad, cifrado de datos y protección. Esto hace replantearse que esta forma de pagar sea más insegura que compartir la tarjeta de crédito o la cuenta bancaria por Internet. Muchas personas utilizan Paypal porque les permite la posibilidad de no compartir sus datos bancarios con la web donde están comprando. Por lo que, en este sentido, las nuevas herramientas, además de ser rápidas, serían más seguras que las utilizadas tradicionalmente.

Dinamarca tiene una ley de 1 de enero de 2016 que pone fin al dinero físico: el 1 de enero de 2030 no circularán ya ni monedas ni billetes. Mientras esa fecha llega, cualquier establecimiento danés puede ya decirnos que no acepta pagos en efectivo…y, seguramente, el resto de los países irán en la misma línea con uno o dos años de diferencia. Esto tiene aspectos positivos y negativos. Haz clic aquí para acceder a la noticia completa.

Confíes o no en estos nuevos métodos de pagos, el futuro va a estar muy ligado a la tecnología. Por el momento, puedes elegir no usarlos, pero el mercado, las tiendas físicas y la seguridad online se están transformando para que estos sistemas sean los más usados por los clientes del presente y futuro.

 

Álvaro Mariscal
Fortium Family Office

 

¿Armonizamos el impuesto de sucesiones y donaciones (ISD)?

¿Armonizamos el impuesto de sucesiones y donaciones (ISD)?

Estos últimos días, asistimos en Andalucía a una campaña en redes sociales y medios de comunicación en contra del ISD, con manifestaciones en las calles incluidas. También hemos conocido casos de personas que casi se han arruinado por recibir una herencia en Andalucía y Asturias. En estas dos comunidades es dónde más oneroso resulta heredar a los familiares directos.

La reacción del gobierno andaluz ha sido tratar de devolver a la administración central la gestión del ISD. Además, ha pedido que, ante las grandes diferencias territoriales, sea el estado el que armonice el ISD y lo haga homogéneo en todos los territorios. Hablamos de familiares directos (descendientes y cónyuges), porque los demás herederos (más alejados en parentesco o sin él) pagan casi igual en toda España.

Como sabemos, las comunidades autónomas (CCAA) tienen unos impuestos propios y otros cedidos por la administración central; es el caso del ISD, que tiene su propia legislación estatal. El ISD y otros impuestos fueron cedidos a las comunidades autónomas en aras de su autonomía fiscal y financiera, formando parte de la financiación autonómica. Las CCAA han ido mejorando, en cuantía diferente, las bonificaciones y exenciones. De ahí viene la desigualdad de tratamiento fiscal en las distintas comunidades.

A la Junta de Andalucía (hasta el pacto con Ciudadanos) no le ha interesado reducir el ISD, ya que perdía ingresos. Lo que esperaba era que la administración central lo reformara y le compensase por los ingresos dejados de percibir. Esto es precisamente lo que propone la Junta, aprovechando las negociaciones del sistema de financiación autonómica. Si el estado armonizara el ISD y la Junta perdiera recursos, aquel tendría obligación de compensar dicha pérdida. Se pretende acabar con la competencia fiscal entre CCAA y eliminar la ventaja que por ejemplo tiene Madrid, donde gracias a su actividad económica, se pueden permitir bonificar el ISD y compensar esta pérdida de ingresos con los de otros impuestos.

De llevarse a cabo la reforma por parte del gobierno central, habría que intentar evitar situaciones injustas. Por ejemplo, bonificando al máximo la empresa familiar y todo patrimonio que ayude, por ejemplo, a facilitar vivienda a los ciudadanos. Haciendo que nadie tenga que pagar por la vivienda que recibe en herencia, no solo aquella que sea la habitual del fallecido, si no también aquella otra distinta de la anterior que sea la vivienda habitual del heredero. Debemos recordar que por los inmuebles de una herencia se ha pagado impuestos en el momento de su adquisición y durante todos los años posteriores.

Debería revisarse al alza la escala establecida en el ISD de patrimonio previo para poder aplicar las bonificaciones a parientes directos. El límite (desde 1999) está en 402.678€, mientras que los valores catastrales de los inmuebles están sobrevalorados. En Sevilla, por ejemplo, han subido un 10% en un año. Este límite podría subirse hasta los 500.000€ y actuar como límite exento para herencias de descendientes o cónyuges. Así evitaremos llegar a la práctica confiscación de la herencia, y hasta del propio patrimonio del heredero, como está sucediendo últimamente en ciertos casos.

Nos preguntamos, ¿cómo se conjugan estas obligaciones y derechos de los artículos 31 y 33 de la Constitución, la obligación de contribuir según la capacidad económica sin llegar a la confiscación, el derecho a la herencia y la no privación de los bienes sin causa de utilidad pública o interés social? ¿Hasta qué punto podría ser inconstitucional valorar los inmuebles de una herencia según unos coeficientes y después, para poder pagar el impuesto, tener que vender el inmueble por debajo de esa valoración? ¿Se podría reclamar la revisión de la declaración presentada en caso de producirse esta situación y pedir la devolución del exceso de impuesto pagado? ¿Es justo que una asturiana, que recibe una herencia de su padre, no tenga liquidez para pagar el ISD, los bancos no le presten el dinero y su deuda se incremente con intereses de demora?

El gran problema se produce cuando en la herencia no hay liquidez para pagar el ISD. En estos casos la operación puede salirnos muy cara. Antes de aceptar una herencia debemos ver las posibles deudas y la liquidez para pagar el impuesto. Es muy conveniente anticiparnos a los problemas y buscar soluciones con ayuda de profesionales, como los que Fortium pone a su disposición.

 

Juan A. García Diez
Fortium Family Office

 

El TC acaba ¿de nuevo? con la Plusvalía Municipal sobre las no plusvalías

Seguramente se habrán sorprendido. La semana pasada se hacía viral en las redes sociales la noticia de que el Tribunal Constitucional (TC) había declarado inconstitucional gravar por el Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (conocida como Plusvalía Municipal) aquellas transmisiones de inmuebles en las que no se producían verdaderas plusvalías.

¿Pero esto no se había declarado inconstitucional en febrero pasado? Nosotros mismos nos hicimos eco de la noticia en este blog www.fortium.es/el-tc-acaba-con-la-plusvalia-municipal-sobre-las-no-plusvalias/.

¿A qué viene entonces tanto revuelo?

Si ustedes releen lo ya comentado en su día en estas páginas recordarán que advertíamos de que aquella primera sentencia del TC de 16 de febrero sólo anulaba un precepto de la norma foral vasca. Desde un estricto punto de vista legal, lo anterior implicaba que la normal estatal, la que aplica en el resto del territorio español, no había sido en realidad tocada por el TC. Por más que la doctrina que emanaba de aquel primer pronunciamiento pudiera ser, en espíritu, aplicable a todas las situaciones en las que se pretendiese gravar plusvalías inexistentes.

Hacía falta pues un pronunciamiento expreso a nivel estatal para que todos los ayuntamientos de España se vieran afectados por la doctrina del TC. Y ese pronunciamiento ha llegado. De ahí el impacto mediático de la noticia. En efecto, el pasado 17 de mayo se dictó la sentencia de referencia, en la que se reproducían los mismos fundamentos de derecho esgrimidos para anular parcialmente la normal foral, ya comentados en nuestra entrada de 14 de marzo, a la que nos remitimos.

Lo importante de este pronunciamiento es que abre, sin ningún género de dudas, la puerta a la recuperación de lo pagado por este concepto, siempre que la liquidación de la Plusvalía Municipal no se encuentre prescrita (en términos generales, siempre que no hayan pasado cuatro años desde el pago del impuesto) y pueda acreditarse, por cualquier medio admitido en derecho (por ejemplo, a través de una tasación pericial independiente), que en la transmisión de los terrenos no se ha producido una plusvalía.

En la sentencia se señala que corresponde al legislador llevar a cabo las modificaciones o adaptaciones del régimen legal del impuesto que permitan no someter a tributación las situaciones de inexistencia de incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana. Así, mientras el legislador no se pronuncie de forma específica sobre el asunto, las vías de recuperación de la Plusvalía Municipal abonada en aquellos casos en los que no se ha producido una verdadera plusvalía pasan por la impugnación de las autoliquidaciones (o liquidaciones giradas) no prescritas con posterior solicitud de devolución de lo ingresado.

Por lo aquí expuesto, recomendamos que revise su situación fiscal a la mayor celeridad, valore los medios de prueba que posee a su alcance para justificar la existencia o no de plusvalías reales en la transmisión de los terrenos transmitidos y proceda a la impugnación de aquellas liquidaciones de la Plusvalía Municipal que puedan verse afectadas por el fallo del TC. Hay que advertir de que, si bien la vía para la recuperación de lo ingresado indebidamente está abierta, el camino no está aún del todo despejado.

Si tiene cualquier duda, en Fortium Family Office contamos con especialistas que podrán asesorarle en todas las fases necesarias para la recuperación de las Plusvalías Municipales abonadas indebidamente dentro de los años de prescripción del impuesto.

 

 

Francisco García Matute
Fortium Family Office

 

 

El año clave de Europa… y de España

El año clave de Europa… y de España

En las últimas semanas estamos todos pendientes, casi en exclusiva, de Estados Unidos y de Cataluña y no miramos a ningún otro sitio.

Sin embargo, nuestro futuro va a jugarse este año en Europa, que vive el momento más crítico de su historia reciente. La crisis del euro de 2011 fue una cuestión monetaria. Esta vez está en juego su propia supervivencia. Hay oscuras sombras que se ciernen sobre el cielo de la Unión Europea (UE) y, por extensión, sobre el cielo de nuestro país.

La primera amenaza es interior y tiene relación con la falta de liderazgo dentro de la propia UE. Juncker y Tusk no tienen ni el discurso ni el carácter para enganchar a los ciudadanos al proyecto europeo. Merkel peca de exceso de prudencia y previsiblemente en las próximas elecciones pierda gran parte de su apoyo, lastrada por la crisis migratoria. Y qué decir de Hollande: el presidente más gris y con menos carisma que Francia ha tenido en décadas y un verdadero lastre para su país y para su partido en el final de su mandato. Es tal la debilidad de los demás candidatos (o muy novatos o desgastados por escándalos), que todos dan por seguro que el Frente Nacional de Marine Le Pen será en mayo uno de los dos contendientes de la segunda vuelta de las elecciones francesas. Está claro que si el FN gobierna Francia, Europa será desmontada en muy poco tiempo. Las elecciones francesas son mucho más importantes para nosotros y el futuro de la UE que cualquier otro evento geopolítico global.

Hablando de elecciones en Europa, parece que hay muchos populismos aflorando por todas partes, empeñados en hacer saltar en pedazos el proyecto europeo. En marzo será Holanda y ya se habla del Nexit, alentado por el Partido por la Libertad, del xenófobo Geert Wilders. En Alemania, con sus elecciones en septiembre, crece Alternative für Deutschland, partidario de sacar al país de la UE. En octubre se da por seguro que Andrej Babis, un millonario corrupto al más puro estilo Berlusconi, se convertirá en presidente de la República Checa. En diciembre pasado, el referéndum celebrado en Italia ha dado alas a los partidos euroescépticos y en Austria el ultraderechista Norbert Hofer ha alcanzado un apoyo en las urnas del 47%, que, afortunadamente, no ha bastado para convertirle en presidente. No podemos olvidar la deriva autoritaria de Erdogan en Turquía, que, aunque no sea estado miembro de la UE, influye (y mucho) en el escenario europeo. En fin, un panorama poco alentador…

La segunda amenaza que podría acabar con Europa es el Brexit. Juncker, un político astuto donde los haya, ya ha advertido de que los británicos van a jugar en los próximos dos años a dividir a Europa. La señora May intentará negociar con unos y con otros diferentes acuerdos, como ya hizo el Reino Unido en los años sesenta. A unos les ofrecerá una relación comercial “especial” (Holanda, Bélgica, Portugal); a otros un mejor trato a sus ciudadanos (Irlanda, Suecia, Dinamarca); en otros casos se tratará de ayuda financiera (Grecia, Chipre, Malta); en nuestro caso se volverá a negociar sobre Gibraltar; etc. Aprovechando el ascenso de la ultraderecha y el debilitamiento de Francia, la estrategia británica volverá a consistir en ir aislando a Alemania. Si Europa sobrevive a las elecciones francesas, el segundo asalto en el que nos jugamos nuestro futuro será el Brexit.

La tercera amenaza, simultánea a las anteriores, es la política exterior de los EEUU. Trump es una amenaza para la UE por varios motivos: en primer lugar, su proteccionismo cuestiona la esencia de la economía europea que es el libre comercio y esto ralentizará nuestro crecimiento; en segundo lugar, está cuestionando la OTAN y, con ella, la seguridad de Europa ante la amenaza de Rusia; y, además, porque su política en Oriente Próximo generará más sufrimiento y una creciente presión migratoria en Europa.

Ante amenazas de este calibre, los continuos rescates de la economía griega o la crisis de la banca italiana, bastante más grave que la que nosotros sufrimos, parecen asuntos de poca relevancia.  

Tengo la sensación de que todos los que creemos en Europa debemos unirnos para defenderla en voz alta y plantar cara a tantos enemigos. Creo que, si somos capaces de sobrevivir a esta tormenta perfecta, debemos plantearnos reformas serias y profundas para hacer de nuestra UE una institución fuerte y eficiente, que ayude a solucionar los retos a los que nos enfrentamos, en vez de sostener una máquina de fabricar burocracia (otra más). Una Europa que vuelva a ilusionar…y que funcione.

 

Carlos Benguría
Fortium Family Office